Qué es Reiki y cómo funciona
por Tarwe Hrossdottir
Qué significa Reiki
Reiki es la energía universal.
La palabra REIKI se pronuncia como se lee y proviene de dos kanjis japoneses:
“REI” =Universal
“KI”= que significa espíritu, energía o fuerza vital.
Reiki es la versión oriental de lo que en occidente llamamos Manejo de Energía.
Lo que conocemos actualmente como Reiki, es un sistema de sanación e iluminación originado en la India o el Tibet hace muchísimos años, cuando aún se usaba la escritura sánscrita.
Su enseñanza se realizaba de forma oral, como la mayoría de las disciplinas antiguas.
Actualmente no hay diferencia entre el Reiki en sí, es decir, la energía universal, y el conjunto de técnicas que usamos para trabajar con ella, y a todo se le denomina con este nombre.
Sin embargo, el conocimiento y uso de la energía universal existe desde hace miles de años, sobre todo en las civilizaciones orientales.
El aprendizaje y la práctica de este conjunto de técnicas, puede utilizarse para reestablecer el equilibrio natural en un paciente o en uno mismo.
Así como para enaltecer nuestro espíritu, trabajando de forma disciplinada para lograr un nivel de conciencia mucho más elevado.
Cómo funciona el Reiki
El Reiki o la Energía natural, funciona como un flujo que restablece el equilibrio de la energía corporal en los diferentes planos de cualquier ser vivo.
Decimos que es una “energía inteligente” porque puede “amoldarse” a lo que cada individuo necesite: aportar o eliminar.
Un ejemplo que puede servir para explicar este fenómeno es el de las turbinas de los aviones en vuelo.
Mientras que al ojo común, atrás de los motores no hay nada, sabemos que se van formando grandes torbellinos que pueden interferir en el vuelo de la aves o de otras aeronaves si no se mantiene un espacio de seguridad alrededor del avión.
Es decir, que el que no veamos el flujo de energía, no significa que este no exista y que no tenga un efecto en los demás.
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Cómo trabajo con Reiki
Cualquiera puede trabajar con Reiki. No se necesitan las “costosas” iniciaciones para manejar una energía que todos tenemos por naturaleza y de la cual el universo está lleno. Simplemente se requiere de una enseñanza meticulosa sobre cómo trabajarla para que se pueda aprovechar de la mejor manera.
La energía universal trabaja pasando a través del sanador, de la misma forma que las ondas de radio, se manifiestan a través de un radio.
Si el radio está descuidado o no se le da mantenimiento, la recepción de la señal tendrá interferencias y ruidos molestos. Así, cuando el sanador no se encuentra en un buen nivel de salud física y espiritual, la energía que llega al paciente es débil y no tiene la fuerza suficiente para dirigirse al lugar adecuado y equilibrarlo.
Darse Reiki uno mismo
Si tienes en mente dar terapias reiki de forma profesional o continua, deberás revisarte una vez al mes para trabajar con tus propios desequilibrios y poder ser un buen canal, y que la energía que pasa por ti esté limpia y sana. Desde luego el reiki también puede utilizarse para el auto tratamiento en cualquier nivel, físico, emocional y espiritual.
La energía puede ser dirigida a un punto en especial o solamente enviada al cuerpo de la persona para que esta se dirija al lugar afectado, debido a que es una energía inteligente. También puede ser usada con animales, plantas, lugares, etcétera y es excelente para combinar con otros tratamientos de tipo naturista como la homeopatía, por ejemplo.
Dar Reiki es seguro
El sanador no corre ningún riesgo al dar energía a otra persona. Este funge como un canal a través del cual pasan las ondas energéticas, pero él no entrega su propia energía vital.
Por esto, cuando una persona tiene una sesión de curación o trabajo espiritual, no debe sentirse cansado o agotado después de esta. Es normal que se sienta un pequeño cansancio debido al estar de pie, o que se tenga un hormigueo en las extremidades causado por el flujo continuo de energía hacia el paciente.
Si el sanador tiene agotamiento, entonces deberá revisarse él mismo para detectar bloqueos de energía en su cuerpo astral. En este caso, estará entregando de su propia energía al paciente lo cual puede ser muy peligroso para ambos.
Si te sientes así, tendrás que apoyarte de técnicas de protección psíquica y darte reiki a ti mismo, al empezar y terminar una sesión.
Los efectos de dar Reiki son inmediatos
Daar Reiki tiene un efecto de bienestar tan inmediato, que entre la comunidad médica se está aceptando el uso de esta técnica como auxiliar en los enfermos.
Practicar Reiki es como tener una turbina en movimiento en el cuerpo, tanto para el que lo da, como para el que lo recibe.
La técnica funciona abriendo de forma voluntaria, consciente y segura “las compuertas” de los cuatro planos, lo que llamamos chakras. Esto permite que la energía circundante fluya dentro y fuera de nuestro sistema.
Ese circuito continuamente está haciendo fluir energía para limpiar energía contaminada, enfermedades, frustraciones, corajes, depresiones, temores, pensamientos destructivos e innumerables alteraciones.
Estar en una sesión de Reiki es como permanecer durante 40 minutos en una “cámara energética” que le aportará un extra de energía a tu cuerpo para que pueda metabolizar de forma correcta lo que le sucede en cualquier plano.
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Los 3 Niveles en Reiki
Mikao Usui, nombró como “Usui Shiki Ryoho” a su sistema de sanación natural. Los diferentes grados del Sistema Usui Tibetano, que es el que nosotros estudiamos son los siguientes:
Primer Grado: Shoden
“Servidor de la Luz”.
Abre los canales de energía y permite a la persona empezar a transmitir correctamente energía hacia sí mismo y hacia los demás. En este se enseñan todas las posiciones de las manos y los símbolos básicos. Se realiza terapia manual.
Segundo Grado: Okuden
“Portador de la Luz”.
Aquí el alumno recibe símbolos más poderosos para que la energía universal pueda actuar de forma mental y a distancia. Estos permiten actuar desde la causa del desequilibrio. Se realiza terapia psíquica.
Tercer Grado y Maestría: Shinpiden
“Maestro de la Luz”.
Activa los símbolos que amplían la unidad con la energía universal y permiten trabajar con la espiritualidad de la persona. También se entregan las técnicas de alineación a otros y se adquiere una responsabilidad mayor, al tomar la decisión de iniciar a otras personas. Se realiza terapia kármica.
Iniciación o Alineación Reiki
En cada uno de los grados se hace una iniciación o alineación de canales de diferente tipo. No debería llamarse una iniciación, sino una alineación, puesto que los centros energéticos del sanador se “realinean” o resetean para limpiarlos y conducir mejor la energía.
Al terminar cada nivel se alinean tres centros energéticos comenzando desde el Chakra Base.
Al terminar el estudio de un nivel, realizas una práctica de depuración por 21 días y al finalizar haces tu propia alineación.
En realidad este paso no es un requisito indispensable, pero si lo es hacer una purificación severa y la repetición de los ejercicios especiales que se te mandan al final, si es que realmente se quiere practicar esta disciplina.
Las técnicas para las alineaciones a otras personas son entregadas con el grado de Maestría, las de autoalineación se entregan en cada grado. Ambas son igualmente efectivas.
Lo más importante es que mantengas tu disciplina de trabajo energético, porque de nada valdrá que te hayas realizado una autoalineación o que te la haya hecho alguien más, si no le das mantenimiento a tus centros energéticos.
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